PDA, principal fuerza política en Bogota,
La capital viene cambiado y gira hacia lo social
Los resultados contundentes que favorecieron al PDA en la última contienda electoral muestra que los Bogotanos le siguen apostando a la consolidación de un programa alternativo al modelo neoliberal, que con un mandato democrático se siga desarrollando la ciudad haciendo énfasis en el aspecto social y en los sectores más vulnerables. Aún así, Samuel Moreno tendrá que enfrentar a un concejo principalmente Uribista.
Con la más alta votación para la alcaldía y para una fuerza de izquierda en la capital, el Polo Democrático Alternativo alcanzó por segunda vez y de forma consecutiva la administración del cargo público más importante después de la Presidencia de la República. Contrario a los interés de los dueños del gran capital, quienes se expresaron ferozmente a través de la radio, televisión y editoriales contra el Polo, el 43.7 % del pueblo capitalino según las cifras arrojadas por la Registraduría Nacional, respaldó la propuesta del PDA en cabeza de Samuel Moreno Rojas.
La derrota que vivió Peñalosa y el Uribismo fue significativa, como también lo fue la diferencia de 325,815 votos que le saco Moreno al candidato del presidente. Muchos han decretado la muerte política de Peñalosa quien solo alcanzó el 28% de los votos y quien en el último período no logró ser candidato único del liberalismo a las presidenciales, se quemó en las elecciones al Senado y esta ultima derrota lo ha dejado en cuidados intensivos. Lo cierto es que esta vez la indecorosa actitud del presidente contra él candidato del Polo Democrático quien como dijo Carlos Gaviria, “encabezo una campaña contra nuestra propuesta, no sólo por fuera de la Constitución sino por fuera de las normas de la decencia”, no le sirvió para superar la fuerza de un partido que día a día crece más.
Estas cifras demuestran tres hechos importantes en la vida política bogotana, lo primero es que el Polo crece y se consolida como partido hasta el punto que le ofrece al electorado un candidato que a diferencia de Garzón es mas orgánico, fruto de una consulta con un programa de partido y no de un individuo, lo segundo es que el acto de sufragar se hizo más conciente, ya que los Bogotanos no cambiaron su voto, bien sea programático o de opinión, a pesar de la influencia que estaba haciendo el presidente a través de los medios de comunicación cuando desde la casa de Nariño señalo al polo de “Comunistas disfrazados” y, “Guerrilleros de civil”. Y lo tercero, está relacionada con ese voto consciente, pues el veredicto de las urnas ha demostrado que la Capital se inclina más por una agenda social, en donde la atención a la salud, educación, vivienda, empleo, etc. sea lo principal tal como lo desarrollo la administración de Lucho Garzón y que ahora le corresponde a Samuel seguir demostrando que la izquierda si puede gobernar con responsabilidad tanto fiscal como social.
A la par de la elección a la alcaldía, las elecciones al Concejo y a las Juntas Administradoras Locales evidenciaron que años tras año el Polo Democrático Alternativo se consolida como la principal fuerza política en la capital. Con 360,863 votos al Concejo el Polo consiguió 11 curules, seguido por cambio Radical quien sacó 339,459 votos equivalentes a otras 11 curules. En las Juntas Administradoras Locales también se sintió el avance del Polo, de los 180 cupos en las 20 localidades se ganaron 61 para un total del 34 % por encima de Cambio Radical con el 25% y el Partido de la U con el 16%.
Estas cifras marca la tendencia que ha tenido el PDA desde su nacimiento, recordemos que en el 2002 Lucho Garzón ganó la alcaldía de Bogotá con 797.466 votos y para este año Samuel Moreno sacó 915.769 que significa un incremento del 13%, en el Concejo del 2003 se obtuvieron 185.800 votos y en este año la cifra fue de 360.863 para un incremento del 94% y por supuesto no hay que olvidar los 680.245 (voticos) que saco la campaña de Lucho presidente en el 2002 para dar un gran salto en el 2006 con 2.613.157 en la campaña de Carlos Gaviria Presidente, la mas alta cifra de votación para una fuerza de izquierda equivalente a un 284 % de incremento, como dijo Carlos Gaviria “¿Qué tal si en cuatro años nos cuadruplicamos?”
Pero la administración de Samuel no la tendrá fácil, en los próximos 4 años se debe enfrentar a un Concejo principalmente Uribista, pese a que el PDA incrementó su cota de participación de 8 a 11 concejales. El margen de maniobra para el alcalde va hacer muy estrecho, los 24 concejales que suman el partido de la U, Cambio Radical, el Partido Conservador, Convergencia Ciudadana y Alas equipo Colombia, representan el 54% de la fuerza en ésta corporación, el restante está distribuido en un 24% para el PDA, y un 13% del Partido Liberal, más un 9 % de otras fuerzas como el Mira, Partido Verde Opción Centro y Pacto, que no son precisamente de oposición.
Esta misma lógica se da en las Juntas Administradoras Locales donde el PDA obtuvo 61 ediles que representan el 34%, seguido nuevamente de Cambio Radical, Partido de la U, Partido Conservador, Alas Equipo Colombia y Convergencia Ciudadana que sumados obtienen 90 curules para un total del 50%, el restante se distribuye en el Partido Liberal con un 14% y Mira con el 2% quienes obtuvieron 26 y 3 ediles respectivamente.
Ante este panorama Samuel Moreno tiene que obrar con mucha inteligencia, es cierto que tiene que gobernar con los mejores y con los más capacitados como dijo ante los medios, pero también es cierto que al interior del PDA hay dirigentes conocedores del pasado y presente de Bogotá, hay grandes intelectuales y estudiosos de la política pública como lo es Hernando Gómez entre otros y que en consonancia con la campaña la administración debe ser dirigida principalmente desde el PDA sin desconocer otras fuerzas que le apostaron al programa del Polo Democrático Alternativo para Bogotá.
El avance del PDA en la capital ha puesto en alerta a las fuerzas de derecha, Samuel Moreno no puede gobernar solo, es necesaria la participación de todos los sectores democráticos en el gobierno, y sobre todo la organización para una participación responsable y decisoria de cara al pueblo. De antemano ya cuenta con 11 concejales, 61 ediles y por supuesto con 20 alcaldes locales que deben ser del PDA (claro está, los mejores y con los más capacitados), sumado a esto, están los miles de líderes, hombres y mujeres que trabajaron en esta campaña, están los militantes, activistas y simpatizantes del Polo y como si fuera poco, están los 915.769 Bogotanos que apoyaron el programa de gobierno y que deben jugar un papel protagónico en esta nueva administración, con políticas “que tengan como objetivo, la búsqueda de la solución de sus necesidades, promueva y fortalezca su organización a partir de diversas formas y alternativas, que permita la generación de espacios de poder popular”[1]. Vistas las cosas así, los próximos cuatro años deben ser de arduo trabajo para materializar y demostrar que OTRA BOGOTA ES POSIBLE, una BOGOTA DEMOCRÁTICA que dé ejemplo a la nación colombiana.
[1] Declaración política, el MODEP con Samuel Moreno Rojas a la alcaldía mayor de Bogotá
miércoles, 27 de febrero de 2008
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