Atentado terrorista o falso positivo
Por Rodolfo Hernández
Dirigente del Movimiento por la defensa de los derechos del pueblo MODEP, integrante del PDA
No deja de ser lamentable que otra acción militar, esta vez con un artefacto explosivo en Blockbuster al norte de la capital, deje como saldo victimas inocentes en esta guerra no declarada. Aun así el análisis no puede partir de calificativos como “acto cobarde” o “atentado terrorista” orientándose de inmediato a replicar la voz del gobierno y a sustentar una sola tesis o responsable sin pruebas comprobatorias.
Y no se puede caer en dicha posición, dado que la lógica manejada desde el mismo gobierno es manipular la información, haciendo uso mediático del poderío público y privado de los medios de comunicación para propagandizar su conducta militarista y así justificar la aplicación de la política de seguridad democrática.
Por lo anterior es que se explica el manejo que desde la noche del ataque a Blockbuster se le ha dado a este hecho. Primero, micrófonos abiertos para que los altos mandos del gobierno (ministro de defensa y ministro del interior) sustentaran sus tesis a priori, “las FARC son los culpables”. Segundo, plena cobertura al presidente para que desde Francia utilizara los hechos (como anillo al dedo) para arremeter contra el proceso de Acuerdo Humanitario, “El Gobierno Nacional lamenta la muerte de dos ciudadanos en el nuevo atentado terrorista contra Bogotá, que muestra nuevamente la farsa de las FARC, que hablan de Derechos Humanos y Acuerdo humanitario, y al mismo tiempo combinan la extorsión y el terror.”[1] Tercero, la forma en que se ha presentado la noticia minutos antes y minutos después de hablar de las próximas liberaciones unilaterales de las FARC, para restarle importancia a este hecho político que nos puede acercar a un Acuerdo Humanitario. Cuarto, completo rechazo a otras tesis que se vienen investigando como es el caso de las extorsiones por grupos paramilitares que están consolidando su poderío económico y que ya habían actuado contra la misma tienda de video en meses anteriores. Y quinto, completo desconocimiento de las autoridades capitalinas, aprovechando la condición para seguir socavando la administración de Samuel, ya que según ellos, con el PDA no hay garantía de seguridad para los Bogotanos.
Todos estos hechos sustenta la tesis que se viene planteando, en el sentido de que es al rededor de la seguridad capitalina, que el régimen de Uribe esta actuando, generando debate y hechos como los ya comprobados falsos positivos por el mismo ejercito, para mostrarle a los bogotanos la necesidad de un gobierno distrital que este al lado de la seguridad democrática.
Cada día esa tesis se sustenta más, recordemos que el lunes 31 de julio del 2006 un carro bomba estalló en el noroccidente de Bogotá al paso de un camión militar y de inmediato fue atribuido a las FARC, 5 días después fue asegurada por terrorismo Alias Roció Beltrán[2] integrante del Comité Temático en la época de las negociaciones a quien le atribuyen los hechos pese a que en noviembre del mismo año toda esa pantomima se desmontara cuando la fiscalía iniciara investigación al mayor Hermida y al capitán Barrero -miembros de inteligencia del Ejército-.por los falsos positivos entre julio y agosto de este año, en vísperas de la posesión (del segundo mandato) del presidente Álvaro Uribe.
Por el momento el Estado sigue utilizando todos estos hechos para avanzar en su política de militarizar la ciudad y pasar por encima de la autoridad distrital con propuestas como la estructura conjunta de inteligencia orientadas desde el Ministerio de la Defensa “El Gobierno Nacional ha determinado conformar en cada región estructuras conjuntas de inteligencia integradas por Ejército, Policía, Fiscalía, CTI y DAS. En Bogotá, esta estructura será coordinada por el Viceministro de Defensa y en cada región por el director del Gaula respectivo.”[3]. Por otro lado los grandes gremios económicos y medios de comunicación como la Casa Editorial el Tiempo, siguen presionando para que la estrategia de seguridad para la capital se oriente hacia un enfoque de lucha antiterrorista, “En años recientes, los logros en la reducción de homicidios y otros delitos en el Distrito Capital han llevado a algunos a solicitar más medidas de convivencia pacífica y menos políticas centradas en la lucha antiterrorista. Pero lo cierto es que son necesarias ambas estrategias, pues los problemas de seguridad requieren enfoques y estrategias distintas, aunque todas con el propósito común de proteger a la población.”[4]
Desde una visión objetiva aun no se sabe quienes son los responsables, lo cierto es que los hechos están siendo bien utilizados por el gobierno para seguir en su puja por el control de la capital. Por el momento ya hay dos capturados que quizás sean juzgados por terrorismo al menos que volvamos a escuchar las palabras del Fiscal General de la nación al referirse a los falsos positivos del mayor y capitán, "No se trató de un acto terrorista. Tampoco de una acción de inteligencia militar. Fue un grosero montaje en el que intervinieron, entre otros, dos oficiales del Ejército"[5].
Por Rodolfo Hernández
Dirigente del Movimiento por la defensa de los derechos del pueblo MODEP, integrante del PDA
No deja de ser lamentable que otra acción militar, esta vez con un artefacto explosivo en Blockbuster al norte de la capital, deje como saldo victimas inocentes en esta guerra no declarada. Aun así el análisis no puede partir de calificativos como “acto cobarde” o “atentado terrorista” orientándose de inmediato a replicar la voz del gobierno y a sustentar una sola tesis o responsable sin pruebas comprobatorias.
Y no se puede caer en dicha posición, dado que la lógica manejada desde el mismo gobierno es manipular la información, haciendo uso mediático del poderío público y privado de los medios de comunicación para propagandizar su conducta militarista y así justificar la aplicación de la política de seguridad democrática.
Por lo anterior es que se explica el manejo que desde la noche del ataque a Blockbuster se le ha dado a este hecho. Primero, micrófonos abiertos para que los altos mandos del gobierno (ministro de defensa y ministro del interior) sustentaran sus tesis a priori, “las FARC son los culpables”. Segundo, plena cobertura al presidente para que desde Francia utilizara los hechos (como anillo al dedo) para arremeter contra el proceso de Acuerdo Humanitario, “El Gobierno Nacional lamenta la muerte de dos ciudadanos en el nuevo atentado terrorista contra Bogotá, que muestra nuevamente la farsa de las FARC, que hablan de Derechos Humanos y Acuerdo humanitario, y al mismo tiempo combinan la extorsión y el terror.”[1] Tercero, la forma en que se ha presentado la noticia minutos antes y minutos después de hablar de las próximas liberaciones unilaterales de las FARC, para restarle importancia a este hecho político que nos puede acercar a un Acuerdo Humanitario. Cuarto, completo rechazo a otras tesis que se vienen investigando como es el caso de las extorsiones por grupos paramilitares que están consolidando su poderío económico y que ya habían actuado contra la misma tienda de video en meses anteriores. Y quinto, completo desconocimiento de las autoridades capitalinas, aprovechando la condición para seguir socavando la administración de Samuel, ya que según ellos, con el PDA no hay garantía de seguridad para los Bogotanos.
Todos estos hechos sustenta la tesis que se viene planteando, en el sentido de que es al rededor de la seguridad capitalina, que el régimen de Uribe esta actuando, generando debate y hechos como los ya comprobados falsos positivos por el mismo ejercito, para mostrarle a los bogotanos la necesidad de un gobierno distrital que este al lado de la seguridad democrática.
Cada día esa tesis se sustenta más, recordemos que el lunes 31 de julio del 2006 un carro bomba estalló en el noroccidente de Bogotá al paso de un camión militar y de inmediato fue atribuido a las FARC, 5 días después fue asegurada por terrorismo Alias Roció Beltrán[2] integrante del Comité Temático en la época de las negociaciones a quien le atribuyen los hechos pese a que en noviembre del mismo año toda esa pantomima se desmontara cuando la fiscalía iniciara investigación al mayor Hermida y al capitán Barrero -miembros de inteligencia del Ejército-.por los falsos positivos entre julio y agosto de este año, en vísperas de la posesión (del segundo mandato) del presidente Álvaro Uribe.
Por el momento el Estado sigue utilizando todos estos hechos para avanzar en su política de militarizar la ciudad y pasar por encima de la autoridad distrital con propuestas como la estructura conjunta de inteligencia orientadas desde el Ministerio de la Defensa “El Gobierno Nacional ha determinado conformar en cada región estructuras conjuntas de inteligencia integradas por Ejército, Policía, Fiscalía, CTI y DAS. En Bogotá, esta estructura será coordinada por el Viceministro de Defensa y en cada región por el director del Gaula respectivo.”[3]. Por otro lado los grandes gremios económicos y medios de comunicación como la Casa Editorial el Tiempo, siguen presionando para que la estrategia de seguridad para la capital se oriente hacia un enfoque de lucha antiterrorista, “En años recientes, los logros en la reducción de homicidios y otros delitos en el Distrito Capital han llevado a algunos a solicitar más medidas de convivencia pacífica y menos políticas centradas en la lucha antiterrorista. Pero lo cierto es que son necesarias ambas estrategias, pues los problemas de seguridad requieren enfoques y estrategias distintas, aunque todas con el propósito común de proteger a la población.”[4]
Desde una visión objetiva aun no se sabe quienes son los responsables, lo cierto es que los hechos están siendo bien utilizados por el gobierno para seguir en su puja por el control de la capital. Por el momento ya hay dos capturados que quizás sean juzgados por terrorismo al menos que volvamos a escuchar las palabras del Fiscal General de la nación al referirse a los falsos positivos del mayor y capitán, "No se trató de un acto terrorista. Tampoco de una acción de inteligencia militar. Fue un grosero montaje en el que intervinieron, entre otros, dos oficiales del Ejército"[5].
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[1] http://web.presidencia.gov.co/comunicados/2009/enero/231.html
[2] Roció Beltrán nunca acepto estos cargos, en cambio “Acepto el cargo de rebelión, ya que desempeño labores ideológicas y políticas dentro de las Farc y difundo el pensamiento del movimiento bolivariano". Tomado de http://www.semana.com/noticias-nacion/alerta-maxima/96295.aspx
[3] http://web.presidencia.gov.co/sp/2009/enero/28/10282009.html
[4] http://www.eltiempo.com/opinion/forolectores/bogota-frente-a-la-extorsion_4780407-1
[5] http://www.pachakuti.org/textos/campanas/paracos/falso_atentado.html
[1] http://web.presidencia.gov.co/comunicados/2009/enero/231.html
[2] Roció Beltrán nunca acepto estos cargos, en cambio “Acepto el cargo de rebelión, ya que desempeño labores ideológicas y políticas dentro de las Farc y difundo el pensamiento del movimiento bolivariano". Tomado de http://www.semana.com/noticias-nacion/alerta-maxima/96295.aspx
[3] http://web.presidencia.gov.co/sp/2009/enero/28/10282009.html
[4] http://www.eltiempo.com/opinion/forolectores/bogota-frente-a-la-extorsion_4780407-1
[5] http://www.pachakuti.org/textos/campanas/paracos/falso_atentado.html
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